La parte cómica es original y divertida gracias sobre todo al personaje de Josh (creador, director, guionista y actor), pero también al surrealismo de sus situaciones. La parte dramática está tratada con atención a los detalles y no cae en el porno-sentimentalismo, más bien al contrario: las situaciones dramáticas que ocurren, que además son bastante graves, están vistas siempre desde un punto cariñosamente divertido.
En el sexto y último episodio de esta primera temporada (Horrible Sandwiches), Josh ve cómo su 21 cumpleaños (del que lleva hablando varios episodios) ha coincidido con el funeral de su tía Peg (a la que todos le habíamos cogido un extraño cariño), así que todas las expectativas que tenía sobre su cumpleaños dejan de tener sentido.
Es un episodio redondo que cierra una temporada corta pero muy bien estructurada. Al principio de la serie, los personajes parten de una situación compleja y (en algunos casos) rota:
- Rose (madre), con una sobredosis de narcóticos.
- Josh, viendo como su novia corta con él por ser gay, aunque él no lo acaba de admitir.
- Caitlin (exnovia) intentando pasar página después de mil años de relación con Josh.
- Tom (amigo) en punto muerto con su insoportable novia.
En 5 episodios todos intentan o ven cómo cambia esta situación, y al final descubren que en el fondo están mejor que antes, aunque la manera en que han llegado quizás no es la más perfecta. Este es un análisis muy serio, está claro, porqué la serie trata todos estos temas de una manera muy divertida pero no por ello superficial. Así que os la recomiendo sin dudar ni un segundo!
Aquí el tráiler del episodio (con spoilers, por supuesto):
P.D. Un gran funeral, por cierto!
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